Dra. María José Alfaro Vega, Directora Médica - Clínica Alfaro, UCR - CMC#6349
La buena noticia es que la carboxiterapia sin dolor sí se puede alcanzar. ¿Pero cómo es posible? En este artículo lo explicamos con detalle.
La carboxiterapia es una terapia con muchos años de existir, y se ha empleado tanto en la parte médica como en la estética con buenos resultados en el tratamiento de la celulitis, cicatrices y obesidad localizada. Sin embargo, la pregunta siempre es: ¿aguantaré la sesión? ¿Por qué? Porque duele.
La introducción del gas que se inyecta, el dióxido de carbono, genera un cambio en la acidez (pH) de la zona y una dilatación de vasitos que usualmente están cerrados, estos cambios producen dolor, y son parte del mecanismo de acción del gas, en otras palabras, si esto no ocurre, no funciona. ¿Entonces siempre duele?
No necesariamente, la sensación de dolor va a variar de acuerdo a varios factores:
La zona de aplicación
La cantidad a inyectar
La velocidad y flujo de aplicación
El umbral del dolor del paciente
La habilidad de quien lo aplica
La técnica de inyección empleada según lo que se va a tratar
Y la mejor de las noticias, ahora existen equipos con un sistema que engaña nuestros nervios para que no sientan el dolor, o que lo sientan menos, y por supuesto, en la Clínica Alfaro contamos con éste equipo. Esto ha sido de gran ayuda para que los pacientes de nuestra clínica cumplan con su tratamiento sin tener que sufrir incomodidades, porque si bien es cierto que la carboxiterapia funciona, también es cierto que requiere de paciencia y varias sesiones para ver resultados.
Como siempre, espero que esto les haya servido para aclarar algunas dudas. Les recuerdo que en la Clínica Alfaro estamos para servirles y asesorarles en estos tratamientos.